domingo, 18 de noviembre de 2012

CUANDO EL INVIERNO ACECHA

          
  Esta mañana, en la terraza, bajo un muy tibio y joven sol de otoño, mientras regaba con mimo mis dos hibiscus hacía esta reflexión: ¿por qué pongo especial esmero en estas dos plantas, de entre las muchas que comparten los espacios de mi casa? ¿Por qué ellas y no otras?.

Será porque presentan su belleza en toda plenitud: jóvenes, vistosas, erguidas, explendorosas,
de hojas turgentes y brillantes.

Cada mañana, visita obligada mientras desayuno, me sorprenden con nuevas flores, y yo casi espero su apertura hora a hora. Porque son luminosas, imponentes, y lucen coquetas su ornamento con el orgullo de ser las más apuestas, las que dominan el jardín.

  Acudo a su reclamo ilusionada, las miro y las admiro, les ahuyento los "bichitos" que osan molestarlas, calmo su sed relativa para que siempre estén hidratadas, incluso les soplo alguna intrusa mota de polvo.

 Y esta reflexión la extrapolo al ser humano; al fin y al cabo, lo más valioso de la creación...

  Nos agrada la piel suave de los niños, su ternura e indefensión, la belleza y plenitud de los jóvenes; no nos importa dedicar nuestro tiempo y nuestro esfuerzo a su cuidado, pero... en la época en que nos ha tocado vivir, en la que no hay cabida para la decrepitud, cuando lo ajado y caduco se desestiman sin ningún género de dudas, ya no nos es placentero ofrecer carantoñas a quienes han alcanzado la edad del deterioro, cuando las líneas del rostro se desdibujan para agrietarse después, cuando se agotan los frutos de las otrora abundantes cosechas.

 Esos cuidados voluntarios se postergan, se distancian...

  Hasta que... nos despojamos del egoísmo y nos vestimos con el traje de la gratitud, y nos afligimos de sólo pensar en lo duro que puede llegar a ser el corazón humano cuando enfriamos los sentimientos... y ya te parecen  hermosos los surcos profundos en el rostro de tus seres queridos, como puede también parecerte bello un escueto y angosto paisaje de invierno, monótono y monocromo.

  Entonces, con la mirada ya más generosa, con la actitud bañada de misericordia, obtenemos la gran recompensa que te ofrece una entrega esforzada.

martes, 23 de octubre de 2012

ODA A "MOTA"



 "Mota" es una preciosa hembra de piel blanca salpicada estratégicamente de manchas negras, como salida de la paleta del pintor que embellece con su pincel toda realidad.

 Su estampa ofrece unas proporciones tan equilibradas que podría establecer el canon modélico para el artista, esculpida en el espacio, en un relieve tan perfecto que invita a aproximarte a ella y comprobar que su imagen es real y palpable.

  Su rostro es austero y bello, el hocico adelantado, los ojos delineados; a veces proyectan una mirada fija; vaga e indiferente, otras. También la boca parece perfilada como si de un toque de carmín de labios se tratara.

 "Mota" es dócil, más suave que el Platero de Juan Ramón y tan mimosa, que cuando se te acerca mendigando una caricia, te ofrece su contacto de tal manera que pretende fundirse contigo.

  "Mota" es elegante, tierna y ... silenciosa, muy silenciosa, pero sientes su compañía permanente, sin condiciones.

  Inolvidables los cafés tomados en la terraza, plácidamente, junto a ella echada a tus pies cual cálido escabel;  y cuando suenan las campanadas del reloj de San Francisco, levanta levemente una oreja, y luego la ceja, escudriñando el aire, recelosa ante ese sonido que, por otra parte, le es muy familiar, y vuelve a reposar, a dejarse acariciar por ese compartido sol de otoño, tan satisfecha, que su expresión languidece de puro gozo.

  "Mota" es ¡nuestro dálmata!


jueves, 18 de octubre de 2012

ESCUCHANDO LA MÚSICA DE CÁMARA DE DVORAK

 Vibran al unísono las notas del violín y los lamentos de mi alma, sincronizados, inundando la estancia, fundiéndose en un abrazo desgarrado, sumergiéndose en el abismo, emergiendo a la vida en una danza frenética, en una lid impetuosa.
y asoma un  impulso vital desconocido, lo contemplo con recelo, a distancia... por intruso, por permitirse depositar sensaciones tormentosas en cada fibra de mi piel, atormentando el espíritu al tiempo que lo acaricia. ¡Música sublime!

sábado, 13 de octubre de 2012

"LA FUGACIDAD INMEDIATA DE TODO CUANTO HACEMOS NOS MANTIENE PERMANENTEMENTE OCUPADOS Y NO NOS PERMITE REFLEXIONAR"

 Pues sí, el relativismo está denostado; se dice que es uno de los males del mundo, que es el causante de la ausencia de valores (y razón no le falta), que la verdad sólo tiene un camino, y que cuando divagas o te pierdes en otras lindes, surgen las contradicciones que te apartan de esa verdad. ¡Lo que está bien, está bien y lo que está mal, está mal! (La frase se las trae y no puede ser más ramplona y carente de lenguaje literario, pero todo el mundo entiende su significado, que va más alla de las palabras). Entonces, ¿para qué perdernos en recovecos de ... "sí, pero...", "y si..."? ¿Para qué dudar si la verdad sólo tiene un camino? ¡¡O es blanco o es negro!! ¡¡Así, con contundencia!!

  Y si, yo levanto timidamente el dedo y pregunto: ¿acaso no existe el gris, o mejor, la escala de grises?.... ¿caigo en el relativismo? 

  Pues yo creo que la dualidad es innegable, como lo es la gama intermedia. Existe lo bueno, lo malo, y también lo regular, lo grande, lo pequeño... y lo mediano... se está lejos, o cerca, o a media distancia, ¡y es así! por más que queramos movernos en parámetros absolutos.

 Incluso lo que, aparentemente, no tiene vuelta de hoja, nos puede sorprender: 
En las horas de luz, o llueve, o el sol está arriba... ¿quién no se ha asombrado porque, en ocasiones, ambos fenómenos coexisten? 

Durante el día luce el sol, en la noche, es la luna quien domina el cielo... pero todos hemos comprobado con admiración, que en ocasiones, al levantar la vista, incluso ya bastante entrada la mañana, que ambos astros están colgados en el firmamento.

 La dualidad existe, convivimos diariamente con ella, y es que el mundo, la naturaleza, el alma y la mente son demasiado complejos como para definirlos de manera simplista en una sóla verdad.

martes, 2 de octubre de 2012

RECICLA, REUTILIZA Y REDUCE

Espacio para sembrar ideas que nos ayuden a recuperar la lucidez que un día perdimos haciendo tanto daño a la Madre Naturaleza.

"La acción más pequeña vale más que la intención más grande"
L. Elsenberg                  
  
Échale un vistazo; como mínimo te sorprenderá

http://www.facebook.com/media/set/?set=a.284845511620142.54683.281537285284298&type=3

¡Quién me lo iba a decir! Yo, tan celosa de preservar mi intimidad, tan adicta a la privacidad... creo un blog. Todavía no tengo muy claro qué persigo con ello, pero considero "la red"como una herramienta indispensable en la vida cotidiana y, por lo tanto, siento la obligación y la necesidad de estar conectada así con el mundo y formar parte de su infinitud como una ínfima partícula.
  Desde luego, de una forma u otra, un blog es un escaparate; y si bien es verdad que en los escaparates exhibes sólo lo que quieres exponer a la vista de todos, también es cierto que los escaparates son espejos en los que se reflejan parte de la realidad... ¡y ahí estamos!.  De todos modo, nadie es tan reservado, o tan modesto, que no quiera proyectar y compartir sus ideas, sus aficiones, sus opiniones... ni nadie es tan abominable como para que sus faltas no sean comprendidas, ni nadie es tan original como para que su personalidad no sea similar a la de este o aquel.
 ¡Allá vamos pues! Con cierto recelo porque sé que habrán contradicciones, que la coherencia puede ser un día el valor más apreciado por mí,  y otro día puede aparecer destrozada y hecha añicos. Correré ese riesgo.  ¡¡¡Arriba el telón!!!